- Con este hito comienza la construcción del nuevo recinto educacional en el que niños del sector Quepuca Ralco podrán continuar cursando su educación básica, en un establecimiento que contempla interculturalidad en su diseño programático y arquitectónico.
Mediante la celebración de este importante hito, se dio inicio de la construcción de la nueva escuela de Quepuca Ralco, infraestructura educacional, que colaborará con la educación de niños de las comunidades del sector y que fue codiseñada entre las propias comunidades, autoridades locales y la empresa, a través del diálogo y del trabajo colaborativo.
El evento de celebración contó con la presencia de Irina Karamanos, quien fue invitada por las propias comunidades a ser parte de la rogativa We Tripantu, realizada previamente al evento de colocación de la primera piedra, del alcalde de la Municipalidad de Alto Biobío, Nivaldo Piñaleo, de representantes de las comunidades Quepuca Ralco, El Avellano, Kepuka Ralko 2, El Barco y Guayalí, del subsecretario de Educación, Nicolás Cataldo, de la gerente de Sostenibilidad de Enel, Antonella Pellegrini y del gerente general de Enel Generación Chile, James Lee Stancampiano.
“Esto es algo que se ha desarrollado en conjunto y con muchos años de diálogo, con mesas de trabajo continuas y significa un hito histórico y muy relevante. Esta escuela permitirá mejorar la vida de todas las familias del territorio y de los niños en particular que hoy día tienen un acceso bastante complejo a la educación, en términos de espacio e infraestructura y que gracias a este proyecto, por fin podrán tener una escuela de más de 1500 m2, con un estilo desarrollado conjuntamente con ellos, con un diseño icónico, circular, que representa algo muy importante en la cultura Mapuche Pehuenche» explicó James Lee Stancampiano, gerente general de Enel Generación Chile.
“La escuela es una infraestructura que permitirá a las generaciones mirar al futuro, porque crecerán teniendo a disposición en su territorio, una escuela digna. Esto nos llena de confianza, debido a que, gracias a proyectos como este, las actuales brechas relacionadas con el acceso a la educación de calidad disminuyen, permitiendo a más estudiantes de las comunidades de Alto Biobío vivir y disfrutar de su proceso educativo, en un lugar diseñado de acuerdo con la identidad del pueblo Pehuenche” indicó Antonella Pellegrini gerente de Sostenibilidad de Enel.
La nueva escuela incorpora aspectos con pertinencia cultural mapuche pehuenche, tanto en lo arquitectónico como en su programa educativo. La nueva infraestructura acogerá a 120 estudiantes y tendrá una superficie total de 1511 m2, donde serán implementadas dos salas de educación prebásica, seis salas de educación básica, cuatro salas para la dictación de talleres, una biblioteca, un internado, cocina y comedor.
«Estamos muy contentos de este espacio y de este evento, porque es un sueño que se está haciendo realidad, en poder proyectar lo que es la educación, en nuestros niños y niñas Pehuenches de acá de Alto Biobío y sobre todo, de nuestra comunidad. Creo que el momento que el momento en el que estamos, simboliza el respeto mutuo con la empresa, porque hoy estamos en esta situación de diálogo, que nos permite a nosotros por ambas partes, tener recíprocamente una especie de colaboración, donde este colegio simboliza todo ese proceso de diálogo», argumentó Pascual Levi Curriao, Lonco de la comunidad Kepuka Ralko 2.
«Es súper importante para nosotros estar presentes como Ministerio de Educación, toda vez que hoy día se comienza un proceso con la primera piedra de la escuela, un proceso reparatorio al que ha llegado la comunidad en un diálogo con la empresa Enel y por lo tanto, como Estado tenemos que estar presente, para acompañar este proceso junto con la municipalidad, para poder desarrollar un buen proyecto educativo pertinente, que sea elaborado desde las comunidades, pensando en cómo se proyecta esto hacia el futuro», expresó Nicolás Cataldo, subsecretario de Educación.
Por otro lado, resulta relevante considerar que el trabajo colaborativo y de co-creación de este nuevo espacio educacional, incluye la implementación de un internado con una superficie de 350 m2, compuesto por 6 dormitorios para estudiantes y 2 para profesores, además de un área de estudio y de un gimnasio multipropósito con una superficie de 840 m2, para acoger distintas actividades que las comunidades deseen desarrollar.