- Por José Manuel Rivera Z., Gerente General de Armony Sustentable.
Cada 5 de junio celebramos el Día Mundial del Medio Ambiente, fecha que nos invita a reflexionar sobre el impacto de nuestras acciones en el planeta y a reafirmar -o bien cuestionar- nuestro compromiso con la sostenibilidad.
En Chile, hemos hecho un largo recorrido en materia medioambiental, demostrando que la innovación y el esfuerzo conjunto pueden transformar la manera en que gestionamos nuestros recursos.
Solemos pensar que el pasto del vecino siempre es más verde. A menudo, miramos hacia el extranjero en busca de modelos exitosos, sin reconocer a veces, los grandes avances y la larga trayectoria que tiene nuestro país en esta materia.
Este año celebramos los 30 años de la Institucionalidad Ambiental, la cual se enmarca en la ley 19.300 y que ha sido el punto de partida para un sin fin de compromisos, leyes, normativas y la formación de una industria que ha ido sustentando y desarrollando los compromisos en Chile en esta materia. Ejemplo de ellos son la Ley REP, la Estrategia Nacional de Residuos Orgánicos ENRO, la Hoja de Ruta por un Chile Circular al 2040, no más bolsas plásticas, segregación de origen y el Proyecto de Ley que promueve el reciclaje de residuos orgánicos en los hogares y comercio, entre otros.
Chile ha demostrado ser un actor relevante en el ámbito medioambiental a nivel global. Nuestro progreso ha sido constante y sostenido, «sin prisa, pero sin pausa». Importante es también destacar que, desde el Ministerio de Medio Ambiente, -independiente del gobierno de turno-, se les ha dado continuidad a los proyectos en curso, cumpliendo y aumentando los compromisos medioambientales,
Esto se debe, en gran medida, al trabajo, esfuerzo y dedicación de personas innovadoras, emprendimientos, empresas y trabajadores del mundo público y privado, quienes han entendido que cada acción cuenta y suma al impacto positivo que generamos colectivamente.
Hemos sido pioneros en la adopción de prácticas innovadoras en la gestión de residuos y es crucial reconocer y valorar las iniciativas que ya están en marcha en nuestro propio territorio. Es enriquecedor poder compartir y adaptar prácticas internacionales, pero siempre con un profundo respeto por nuestra idiosincrasia y la diversidad de nuestras comunas, cada una con sus particularidades y necesidades específicas.
En este sentido, en el contexto del día del medio ambiente quiero invitarlos a cambiar nuestra percepción de lo que es un residuo. Ya no podemos considerarlo como basura, sino como insumos valiosos que, -con el tratamiento adecuado-, pueden reintegrarse al ciclo productivo. Esta perspectiva es fundamental para avanzar hacia una economía circular, donde cada material tenga múltiples vidas útiles.
Hoy, más que nunca, debemos ser optimistas, aplaudir nuestros logros y reconocer el trabajo que aún queda por hacer. La lucha por un medio ambiente sostenible no es tarea de unos pocos, sino un esfuerzo conjunto que requiere la participación activa de toda la sociedad. En Armony Sustentable, reafirmamos nuestro compromiso con esta causa, y continuaremos trabajando para transformar la economía y la forma en la que pensamos y construimos un Chile más limpio y verde para todas las generaciones que vendrán.