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5 puntos clave para la electrificación de flotas en el Retail
Por Andrés Pizarro, Gerente Comercial de Enérgica City.
El proceso de electrificación de flotas consiste en convertir una flota de vehículos que operan con combustibles fósiles a vehículos eléctricos. Debido a las importantes oportunidades que ofrece, este proceso es fundamental para todas las industrias y el Retail no es la excepción. Para que el sector pueda avanzar, es importante tomar en cuenta cinco puntos clave.
El primero es la evaluación técnica. Los retailers deben determinar si la flota puede ser electrificada manteniendo o mejorando el nivel de servicio actual y analizar las rutas actuales para maximizar la eficiencia de los vehículos eléctricos. A continuación, es importante evaluar la infraestructura de carga necesaria, incluyendo la ubicación y capacidad de los cargadores.
El segundo elemento clave es la evaluación económica. Esta incluye análisis de costos y beneficios para determinar si la electrificación es económicamente viable; comparar los costos operativos actuales con los proyectados para los vehículos eléctricos y los costos operativos entre automóviles eléctricos y de combustión interna. Debido a que el Retail funciona en base a Opex, la electromovilidad tiene que ser en función de un servicio de costo menor al actual a combustión. Además, los grandes retailers pueden aprovechar las ventajas que les entrega su tamaño, lo cual puede influir en costos de energía menores a otras industrias.
El tercer factor fundamental es la capacitación de personal técnico para la instalación y mantenimiento de la infraestructura de carga, así como la gestión de instaladores y proveedores para asegurar que cumplan con los compromisos y estándares de calidad. En este punto también es importante destacar el valor agregado que tiene también infraestructura de carga en el servicio al cliente.
El cuarto elemento clave son los aspectos regulatorios y normativos, es decir, preocuparse de cumplir con las normativas y regulaciones locales relacionadas con la electromovilidad. En este sentido, es necesario también una actualización constante de la normativa eléctrica y de transporte. Este proceso es integral y requiere de una planificación detallada y una ejecución coordinada para asegurar que la transición a una flota eléctrica sea exitosa y sostenible.
«Finalmente, el último factor fundamental para que el Retail avance en la electromovilidad es el monitoreo y optimización continuos. Para esto es clave implementar sistemas de monitoreo para evaluar el rendimiento de la flota eléctrica y ajustes y optimización continua para mejorar la eficiencia operativa y reducir costos. Esto es esencial para el Retail que requiere llevar a cabo a electrificación de su flota frente a una demanda estocástica y donde las rutas van cambiando constantemente según las necesidades de entrega de los clientes»
Nuestra estrategia de electromovilidad a nivel país, indica que al año 2035 se comercializarán sólo vehículos eléctricos. Ante esto, es urgente implementar la electrificación de flotas en el Retail -y en todas las industrias-, sobre todo para aquellas flotas de alto recorrido. Sin embargo, es necesario avanzar no solo porque es lo correcto, sino que también porque rinde frutos: la electromovilidad permite reducir el impacto ambiental, al mismo tiempo que baja los costos al hacer más eficientes las operaciones. Por lo tanto, avanzar en la electromovilidad hoy es fundamental.