AIE: América Latina desempeñará un papel esencial en la transición energética global

• En un momento de creciente incertidumbre geopolítica y aceleración de las transiciones energéticas, una extraordinaria dotación de recursos energéticos y minerales, así como una historia de liderazgo en energía limpia, posicionan a América Latina y el Caribe para desempeñar un papel cada vez más influyente en el sector energético mundial, según un nuevo informe especial de la AGENCIA Internacional de Energía (AIE).

El Latin America Energy Outlook es el primer análisis profundo y exhaustivo de la región realizado por la AIE, que abarca toda la gama de combustibles y tecnologías energéticas en los 33 países. El informe concluye que la riqueza de recursos y la experiencia de América Latina y el Caribe en su desarrollo –desde energías renovables de alta calidad hasta petróleo y gas y minerales críticos– podrían hacer importantes contribuciones a la seguridad energética mundial y a las transiciones a la energía limpia con los paquetes de políticas adecuados, además de impulsar la propia transición de la región y generar importantes beneficios para las economías locales después de una década de lento crecimiento.

El informe especial se basa en aportes sustanciales de funcionarios gubernamentales, expertos y partes interesadas de América Latina y el Caribe, sobre la base de décadas de trabajo de la AIE en temas de energía y clima con la región.

América Latina y el Caribe ya cuentan con uno de los sectores eléctricos más limpios del mundo, lo que ofrece perspectivas brillantes para las futuras industrias de energía limpia. Las energías renovables, lideradas por la energía hidroeléctrica, generan el 60% de la electricidad de la región, el doble del promedio mundial, mientras que algunos de los mejores recursos eólicos y solares del mundo se encuentran en países como Brasil, México, Chile y Argentina. El uso de la bioenergía está muy extendido en toda la región y es un importante exportador de biocombustibles.

MINERALES Y ENERGÍA

Mientras tanto, los países de América Latina y el Caribe poseen alrededor del 15% de los recursos mundiales de petróleo y gas natural. Y la región es muy importante para la producción de minerales que son componentes esenciales en muchas de las tecnologías de energía limpia de rápido crecimiento de la actualidad, con alrededor de la mitad de las reservas mundiales de litio y más de un tercio de las reservas de cobre y plata. El suministro de electricidad limpia de la región sienta las bases para la extracción y el procesamiento sostenibles de estos materiales.

«América Latina y el Caribe puede desempeñar un papel importante en la nueva economía energética mundial. Con increíbles recursos naturales y un compromiso de larga data con las energías renovables, los países de la región ya tienen una ventaja en las transiciones seguras y sostenibles hacia la energía limpia. Apoyarse en estas transiciones impulsaría el crecimiento de las economías locales y pondría al sistema energético mundial sobre una base más segura», dijo el director ejecutivo de la AIE, Fatih Birol.

«Nuestro informe muestra que el apoyo a la formulación de políticas y la cooperación internacional son esenciales para garantizar que la región pueda aprovechar al máximo su notable potencial energético», agregó Birol.

LA INVERSIÓN EN LA REGIÓN

Según el informe, la inversión en la región también debe crecer sustancialmente. Para cumplir los compromisos, la financiación de proyectos de energía limpia debe duplicarse de aquí a 2030 hasta alcanzar los 150.000 millones de dólares y quintuplicarse de aquí a 2050. En este escenario, la relación entre inversión en fuentes limpias y combustibles fósiles, que no se han reducido, aumenta desde alrededor de 1:1 en la actualidad a 4:1. en la década de 2030.

Las transiciones centradas en las personas también deben centrarse en brindar acceso universal a la energía moderna a precios asequibles, según el informe, ya que 17 millones de personas en la región carecen de acceso a la electricidad y 74 millones no tienen acceso a suministros de cocina limpios.

Más allá de abordar las emisiones de CO2, los principales productores de la región pueden reducir las emisiones de metano de las operaciones de petróleo y gas en casi un 80% a bajo costo, y alrededor de un 40% sin costos netos, apoyando el Compromiso Global de Metano que la mayoría de los países han firmado. Sobre la base de los compromisos anunciados, las emisiones derivadas del uso de la tierra y la agricultura, que representan la mitad de las emisiones de gases de efecto invernadero de toda la economía en la región en la actualidad, se reducirán para finales de la década y alcanzarán el cero neto. Alrededor del 85% de los bosques de la región se encuentran en países que forman parte del Compromiso de Glasgow, cuyo objetivo es detener la deforestación para 2030.

CINCO PAÍSES LATINOAMERICANOS SON MIEMBROS

El trabajo de la AIE en temas de energía y clima con socios en la región continúa profundizándose. La familia de la AIE ahora incluye cinco países latinoamericanos: Argentina, Brasil, Chile, Colombia y México.

«El informe especial es un hito en nuestro trabajo con los países de América Latina y el Caribe, y esperamos con interés una mayor colaboración regional y bilateral inspirada en su análisis, que establece un camino claro para que los países cumplan sus objetivos energéticos», dijo el Dr. Birol.

«La AIE está lista para apoyar a los gobiernos de toda la región a medida que avanzan en sus transiciones a la energía limpia, construyendo un sistema energético global más seguro y justo en el proceso», concluyó Birol.