- Por Asociación de Generadoras de Chile
Chile se ha destacado como un país líder en la integración de energías renovables, lo que resulta crucial para alcanzar la carbono neutralidad antes de 2050, tal como lo establece la Ley Marco de Cambio Climático. Según el ranking Bloomberg Climatescope 2022, Chile continúa siendo el país emergente más atractivo para el desarrollo de energías renovables, posicionándose también como uno de los países con mayor integración de generación solar en el mundo. La iniciativa público-privada para retirar centrales a carbón, sumada al aumento en la integración de generación solar y eólica que alcanzó una participación anual de más del 28% en 2022, ha permitido reducir en más de un 20% las emisiones de CO2 del sector eléctrico. En términos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, no hay ningún otro sector de la economía chilena que haya avanzado tanto como el eléctrico.
Pero Chile no solo se ha destacado por la integración de energías renovables en sus sistemas eléctricos. También es reconocido a nivel internacional por su experiencia en generación eléctrica, gracias a un modelo que se basa en la competencia y la innovación. Hace 40 años, Chile se convirtió en el primer país del mundo en introducir la competencia en el segmento de generación eléctrica. Los principios económicos del modelo que se implementó en Chile, también conocido como el “sistema marginalista”, tienen su origen en el trabajo del ingeniero francés Marcel Boiteaux en el año 1949, mientras trabajaba en la empresa estatal Electricité de France buscando la manera óptima de tarificar la energía eléctrica. Este enfoque, que ha sido perfeccionado y complementado con diversos instrumentos económicos y financieros, ha sido la base para la reestructuración de los principales sistemas eléctricos del mundo, lo que demuestra su efectividad y viabilidad en el largo plazo.
Hoy, la profunda transformación del sistema eléctrico por la incorporación masiva de energías renovables, el retiro de centrales térmicas a carbón, y la necesidad de integrar de manera oportuna nuevas tecnologías, como el almacenamiento, impone desafíos que van a requerir una revisión del diseño de mercado y regulación del sistema eléctrico chileno. La buena noticia es que los elementos que se requiere perfeccionar ya están documentados en informes de diversos organismos, todos los cuales indican que será necesario mejorar, pero no modificar, las bases del denominado “sistema marginalista”.
En un estudio de 2018 de Generadoras, titulado “Diseño del mercado para gran participación de generación variable en el sistema eléctrico de Chile”, ya se identificaba la necesidad de aumentar la granularidad temporal de precios, de co-optimizar los servicios de energía y reservas, y también de implementar esquemas de múltiple liquidación para gestionar los costos de desvíos respecto a la programación, entre otros. Estas recomendaciones, que apuntan a integrar elementos que son esenciales para remunerar de manera adecuada los atributos de flexibilidad que pueden entregar múltiples tecnologías, incluyendo el almacenamiento, no se restringen al sistema eléctrico chileno, sino que también son compartidas por la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA, por sus siglas en inglés) en sus múltiples informes sobre diseño de mercado y regulación para la integración de energías renovables¹.
Estas mismas recomendaciones, sumadas a la posibilidad de transitar a un mercado de energía basado en ofertas, están recogidas en la hoja de ruta del Coordinador Eléctrico Nacional, en informes de la Unidad de Monitoreo de la Competencia y en estudios desarrollados para la Comisión Nacional de Energía (CNE). En particular, el estudio “Diseño para el perfeccionamiento del mercado eléctrico nacional en la transición hacia esquemas de ofertas incorporando señales de flexibilidad y nuevos agentes participantes”, elaborado por la consultora Vinken para la CNE en 2021, además de proponer una secuencia ordenada de hitos y plazos estimados para llevar a cabo una reforma al mercado eléctrico mayorista, también destaca la importancia de que cualquier modificación que se lleve a cabo debe realizarse de forma armónica y coherente, tomando en cuenta las señales de remuneración de energía, potencia y servicios complementarios.
Sin perjuicio de lo anterior, y tal como fue expuesto en la Mesa público-privada del Mercado de Corto Plazo de la CNE, Generadoras de Chile considera necesario adoptar acciones prioritarias que permitan acomodar de manera eficiente el aumento significativo en la generación renovable y reducir el impacto de las repercusiones de la pandemia y la guerra de Ucrania en el sector eléctrico, mitigando de paso los efectos sobre diversas empresas generadoras en situación de estrés financiero. En razón de ello, creemos que sería adecuado abordar de manera oportuna aspectos que incluyen la mitigación de los impactos financieros de las leyes de estabilización de tarifas para poder invertir los recursos en el desarrollo renovable; señales claras para el desarrollo de almacenamiento que nos permita aprovechar la abundancia de generación solar y eólica que hoy no está siendo totalmente aprovechada; una proactiva y adecuada gestión del sistema de transmisión existente; una mejor planificación de la transmisión necesaria para la transición energética; promover innovaciones tecnológicas y de mayor trazabilidad en la operación, del Coordinador Eléctrico Nacional; y una revisión del diseño de las licitaciones de contratos de clientes regulados.
Valoramos que se abra un espacio de discusión participativa para buscar medidas de corto plazo que aborden la situación de estrés del sistema, y que nos permita avanzar en la construcción de consensos. Desde Generadoras de Chile, como representantes de los principales operadores e inversionistas en energías renovables, estamos totalmente disponibles para ello.
Alineado con lo anterior, el ministro de Energía ha indicado como prioritario avanzar en una reforma al mercado mayorista para poder continuar avanzando en la integración de renovables al sistema eléctrico. Por lo tanto, es fundamental que se sigan considerando las recomendaciones de los organismos y expertos para lograr un desarrollo y operación seguro, eficiente y alineado con el compromiso climático del país. La buena noticia es que se cuenta con una base sólida de informes y recomendaciones de expertos para avanzar en la reforma del mercado eléctrico, lo que permitirá continuar entregando energía confiable y competitiva al país en el largo plazo. (Editorial del Newsletter)